En la grabación se observa cómo Sergio Llull, del equipo blanco, comete una dura falta contra su rival estadounidense Kevin Punter, tras lo cual este se le encara. Entonces los compañeros de ambos se enzarzan en una multitudinaria trifulca.

Así, puede verse cómo el francés Guerschon Yabusele, del Madrid, hace una llave contra uno de sus oponentes y lo tira al suelo, mientras que Punter le propina varios puñetazos al bosnio Dzanan Musa, a quien el galo Mathias Lessort agarra por el cuello y lanza sobre el parquet.

En ese momento el cuerpo técnico y los jugadores del banquillo tratan de separar a los implicados —que siguen empujándose— y poner un poco de orden. Tras esto, los árbitros expulsan a los jugadores que participan en la pelea y a los que invadieron la pista desde la banca.

Ganó el equipo serbio

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A raíz de esa decisión, los dos equipos se quedaron sin el mínimo de baloncestitas necesario para seguir jugando, por lo que, a pesar de que quedaban un minuto y cuarenta segundos del último cuarto, se dio oficialmente por terminado el encuentro con el marcador que había en ese momento, 80-95 a favor del equipo serbio, que ahora lidera la serie por 2-0.

“La Euroligacondena enérgicamente los hechos ocurridos al final del partido”, manifestó el organismo en un comunicado. “Esos eventos no representan los valores de respeto que la liga y sus clubes promueven y que encarna el deporte del baloncesto”, añadió.

Asimismo, detalló que ha presentado los hechos a un juez disciplinario independiente de la Euroliga, que en las próximas 24 horas dictará una resolución sobre las incidencias registradas en pista, tal y como establece la normativa de la liga.