Como varias de las zonas de conflicto relacionadas hoy en día con Rusia son de naturaleza naval, Moscú cada vez se centra más en modernizar su Marina de Guerra y la revista estadounidense The National Interest ha analizado los buques de superficie más peligrosos de la Armada rusa.
El resultado de estos esfuerzos son buques de guerra que “poseen importantes capacidades de amenaza naval”, aunque algunos “no están exentos de desafíos técnicos, indica el autor del artículo, Mark Episkopos, quien destaca los cinco que estima más peligrosos.
Crucero Piotr Veliki
Esa lista la encabeza el crucero pesado de propulsión nuclear Piotr Veliki, el buque insignia de la Flota del Norte de Rusia, la más fuerte de las cuatro que tiene ese país. El principal objetivo de esta nave, la única a flote de los cuatro cruceros del proyecto 1144 Orlán construidos por la Unión Soviética —clase Kirov, según la OTAN—, es perseguir y hundir portaviones enemigos.
Debido a ello, está equipado con una amplia gama de misiles de ataque y fuertes medios antiaéreos, como el sistema de misiles antiaéreos S-300F, aunque la Armada rusa planea equipar tanto al Piotr Veliki como al Admiral Najimov —otro crucero de misiles de propulsión nuclear del proyecto Orlán que está en reparación— con el nuevo S-400 para mejorar sus capacidades contra los aviones de combate furtivos, como el F-35.
Asimismo, la Marina de Rusia está probando los misiles hipersónicos 3M22 Tsirkón, un arma antibuques aún más letal que los misiles P-700 Granit que porta esta embarcación.
Crucero Moskva
Esta nave entró en servicio en 1982 como cabeza de serie del proyecto 1164 Atlant y ahora es el buque insignia de la Flota del Mar Negro. Sus 16 potentes y muy pesados misiles antibuque Basalt R-500 y el sistema antiaéreo S-300F hacen que sea muy peligrosa para los grupos de portaviones.
Desplegado cerca de la provincia siria de Latakia en 2015, resultó clave en el esfuerzo ruso para disuadir a Turquía de que interviniera en la guerra de Siria durante el tenso periodo que atravesaron las relaciones Moscú-Ankara.
Corbetas del proyecto 20380
El tercero en la lista es la corbeta Soobrazitelny, la segunda de las cinco naves en servicio y 13 previstas del proyecto 20380, que emplea el sistema modular de armas antisubmarinas Paket-NK.
Este armamento no tiene análogos en el mundo, ya que permite el uso de torpedos de guiado térmico MTT y antitorpedos reactivos M-15 desde el mismo lanzador gracias a su sistema de control integrado.
Destructor Nastoichivy
El cuarto lugar es para el destructor Nastoichivy del proyecto 956A Sarich. Se trata del buque insignia de la Flota del Mar Báltico y está armado con muy potentes misiles antibuque P-270 Moskit.
Portaviones Admiral Kuznetsov
En quinto lugar se encuentra el portaviones Admiral Kuznetsov, que Rusia clasifica como un ‘crucero de portaviones pesado’ debido al potente arsenal de armas que porta, además de su ala aérea.
Hoy en día es el único portaviones de Rusia y, a pesar de los problemas técnicos que afrontó, aún supone una amenaza grave. Este crucero porta los cazas Su-33 y MiG-29K, sistemas antiaéreos Kinzhal y Kortik, 12 misiles de crucero antibuque Granit y una gama de armas con menor alcance.
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