El expresidente de Argentina Alberto Fernández respondió a los insultos del actual mandatario de ese país, Javier Milei, quien lo tildó de “títere” y “caradura”.
“¿Lo escucharon lo del títere? Hicimos un ajuste del 7 puntos del PBI [Producto Bruto Interno] y el caradura dice que fue insignificante”, dijo Milei, refiriéndose a Fernández, durante su participación en la gala anual de la Fundación Libertad el miércoles, citado por Perfil.
Ante ello, llegó la contestación de Fernández, mediante una publicación en su cuenta en X: “Si el presidente se refirió a mí llamándome ‘títere’ quiero decirle que no lo soy, no lo fui ni lo seré“.
Si el presidente se refirió a mí llamándome “títere” quiero decirle que no lo soy, no lo fui ni lo seré. También debe saber que mi perro no me aconseja (y está vivo), que las “fuerzas del cielo” no me mandan señales y que mis acciones y reacciones son el resultado de la reflexión… https://t.co/pRLioLwfOH
— Alberto Fernández (@alferdez) April 25, 2024
“También debe saber que mi perro no me aconseja (y está vivo), que las ‘fuerzas del cielo’ no me mandan señales y que mis acciones y reacciones son el resultado de la reflexión y no de alteraciones psicológicas“, apuntó el expresidente, en una clara burla a Milei, ante los rumores de que se comunica con Conan, su mascota muerta.
Asimismo, Fernández le dejó claro a Milei: “No dije que su ajuste es insignificante. Su ajuste es inhumano, brutal y fundamentalmente innecesario. Lo insignificante es el falso resultado fiscal que dice haber logrado con semejante ajuste y que dio a conocer en una cadena nacional penosa”.
El exmandatario también ironizó sobre su temor de “que el presidente se siga informando por Jumbo bot”, recordando con ello cuando Milei y el ministro de Economía, Luis Caputo, citaron una cuenta falsa para hablar de una supuesta deflación.
Fernández pasó a explicar que el programa acordado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) “establecía que en 2023 el Estado Nacional debía reflejar un déficit de 1,9 %”, pero, finalmente, “como consecuencia de la sequía y sus efectos sobre la economía, el déficit fiscal fue del 2,7 %”, lo que significa —agregó— “que el desvío sobre el programa fue del 0,8” puntos porcentuales.
“En ese escenario, donde la industria crecía, la desocupación era la más baja de los últimos 38 años, la obra pública generaba desarrollo, la salud, la educación y la ciencia y tecnología estaban financiadas por el Estado y conducidas por personas experimentadas en esas materias, ni había una hiperinflación del 15.000 % como afirmó al asumir, ni el déficit era del 15 % como dijo antes o del 5 % como dijo ahora”, reclamó Fernández.
“Basta de mentir Presidente. Ya está probado que la mentira tiene patas cortas”, expresó.
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